Reseña: Kill Bill, Volumen 2 (2004)

Director: Quentin Tarantino.
Intérpretes: Uma Thurman, David Carradine, Daryl Hannah, Michael Madsen, Chia Hui Liu.

Sinopsis: Tras vengarse de O-Ren Ishii (Lucy Liu), "La Novia" (Uma Thurman) buscará a los últimos asesinos que intentaron quitarle la vida en mitad de su boda.

Tras la primera entrega, un año más tarde nos llegó Kill Bill: Volumen 2, donde de nuevo podemos ver a Uma Thurman en el papel de la infatigable vengadora. En este título no podía ser de otra manera, el director, Quentin Tarantino, sigue mostrándonos el cine al que tan característico síntoma aporta y que naturalmente, tanto le gusta.


Existen muchas subtramas en Kill Bill: V2 que la hacen bastante interesante. Aunque va más de la mano de la precuela que de la secuela; es decir, constantemente nos explica a través de flashbacks cómo transcurrió el fatal enlace, cómo se convirtió en la mejor asesina del mundo, etcétera.

A decir verdad siempre me gustan las explicaciones, pero en esta ocasión quizás se marcha demasiado por las ramas dándolas. A su vez, al incluir tantos flashbacks consigue hacerla bastante lenta y duradera, por lo que hubiese suprimido bastantes escenas. Sobre todo el entrenamiento con Pai Mei (Chia Hui Liu), pues aborda elementos del cine setentero oriental, que podemos ver en películas como El Luchador Manco (Yu Wang, 1972); la característica de este tipo de cine es que pasa de lo extravagante a momentos de lo más desvariantes y siempre en alusión a las artes marciales. Que estas características las posea Kill Bill es algo arriesgado, pues es un guiño que no todo el mundo entenderá y que quizás esté demasiado exagerado para el actual cine.

Tengo que añadir que Kill Bill: V2 carece de la agresividad y la violencia de la primea entrega, y aunque en ocasiones se producen momentos realmente violentos, no llegan ni de cerca a la efectividad del volumen I.

Se centra en la historia y los diálogos, quedándose la venganza en un segundo plano del que no acaba de convencer. Sin duda desvaría de manera exagerada, llegando a tener un tono humorístico directo. Tarantino siempre introduce sutilmente el toque de humor, sin embargo, en esta entrega se le ha ido de las manos hacia un humor demasiado evidente.


Entre la poca "venganza" de la que tanto hace incapié la protagonista, los numerosos diálogos y la poca credibilidad de su eficiencia como asesina en esta película, me sitúan ante una postura reacia hacia esta entrega, deseándo olvidarla antes que recordarla.

Para destacar: Las escenas de la autocaravana.
Para olvidar: Una mezcla extraña de estilos no definidos.